Eva cree que los padres deben recuperar su voz en la educación de sus hijos. La participación de los padres es fundamental para garantizar que los niños reciban la educación de calidad que merecen.
Eva conoce de manera personal cómo las adversidades pueden afectar seriamente el aprendizaje y desempeño de los niños. Las escuelas deben ofrecer apoyo social y emocional a los estudiantes.
Eva cree que al garantizar un financiamiento equitativo para las escuelas, podemos ofrecer una educación de alta calidad en todos los vecindarios de la ciudad. Ningún padre debería sentir que necesita enviar a sus hijos a otro lugar para recibir una buena educación.